22 Abr

Análisis de Ciclo de Vida (ACV)

¿Qué es el Análisis de Ciclo de Vida (ACV)?

El análisis de Ciclo de Vida (ACV) es una herramienta que sirve para estudiar los impactos ambientales a lo largo de todo el ciclo de vida de un producto, proceso o actividad.  Considera toda la historia del producto o actividad a estudiar, desde su origen hasta que termina siendo un residuo. 

Ciertamente, el análisis de ciclo de vida de un producto permite la identificación de los principales impactos ambientales (vertidos, residuos, emisiones a la atmósfera, consumos de materias primas y de energía). Tiene en cuenta todas las etapas de su ciclo de vida.  Va desde su origen, es decir, la extracción y procesado de materias primas, pasando por la producción, transporte y distribución, hasta el uso, mantenimiento, reutilización, reciclado y disposición en vertedero al final de su vida útil. Una vez identificados los principales impactos a lo largo de su ciclo de vida, permite realizar el análisis de alternativas en procesos productivos y la implementación de criterios ambientales en estrategias. 

Etapas del Análisis de Ciclo de Vida (ACV)

La realización de un análisis de ciclo de vida es un proceso laborioso y complejo que requiere de técnicos ambientales especialistas. Dada su complejidad es necesario abordar el trabajo en diferentes etapas:  

  • Definición de objetivos y alcance

    Es necesario conocer los objetivos que perseguimos con el estudio antes de abordarlo. Debemos exponer los motivos por los que se lleva a cabo el análisis de ciclo de vida y establecer el alcance del mismo. ¿Qué buscamos con la realización de una ACV? 

  • Inventario del Ciclo de Vida (ACV)

    Se identifican y cuantifican todas las entradas (consumo de recursos y materiales) y todas las salidas (emisiones al aire, suelo, aguas y generación de residuos) que potencialmente pueden causar un impacto durante el análisis de ciclo de vida. De igual manera, en esta fase debemos hacer una recopilación de datos y analizar la calidad de los mismos. 

  • Evaluación de los Impactos del Ciclo de Vida

    Se establece una relación de entradas y salidas en el inventario con los posibles impactos sobre el medio ambiente, la salud humana y los recursos. Esto se hace con el objetivo de clasificar y evaluar cuánto de importantes son los potenciales impactos que se generan.  A continuación, se establecen las categorías de impacto. Por último, se asignan los datos del inventario a cada categoría de impacto según el tipo de efecto ambiental esperado.  

  • Interpretación de resultados

    Tras la realización del Análisis de Ciclo de Vida habremos identificado en qué fases o elementos del ciclo de vida del producto se generan las principales cargas ambientales, y por tanto, esos elementos serán claves a la hora de implementar las mejoras, puesto que son los causantes del mayor impacto ambiental. Según los objetivos que se establezcan, se obtienen conclusiones y recomendaciones que contribuyen a la toma de decisiones. Ésta es probablemente la parte crítica y más importante de todo el análisis de ciclo de vida. Si el objetivo que persigamos sea la comparación de distintos productos, podremos saber cuál de ellos presenta un mejor comportamiento ambiental. 

Para qué sirve

En concreto, el Análisis de Ciclo de Vida ofrece la posibilidad de calcular el perfil ambiental de un determinado producto o servicio, lo que conlleva múltiples aplicaciones:  

  • Una identificación de oportunidades de mejora del desempeño ambiental del producto en las fases de diseño y desarrollo. 
  • Una comparativa entre productos pudiendo seleccionar las alternativas más sostenibles 
  • El establecimiento de prioridades en la planificación estratégica del producto. 
  • La elección de indicadores de desempeño ambiental, entre los que se incluyen técnicas de medición. 
  • Acceso a ecoetiquetas y/o declaraciones ambientales de producto que permiten un mejor posicionamiento en el mercado.
  • Llevar a cabo estrategias de marketing Ecológico. 

Por tanto, el análisis de ciclo de vida es una herramienta determinante en la transición hacia un modelo de Economía Circular y sostenible ya que aporta información valiosa sobre los perfiles ambientales de productos y servicios. 

Metodología para realizar un Análisis de Ciclo de Vida

Como resultado, dada la complejidad de un Análisis de Ciclo de Vida se hace necesario disponer de una normalización o protocolo que marque las líneas a seguir durante todo el estudio. Por esta razón “International Standards Organisation” ISO ha elaborado una serie de normas ISO. Éstas sirven de guía en la elaboración del Análisis de ciclo de vida ACV. Si quieres saber más sobre la  norma ISO 14040 te recomendamos este artículo sobre el tema.

En 1994 se estableció dentro de ISO el comité técnico TC207 relacionado con la normalización de herramientas ambientales, incluido el ACV. Dentro de la normalización ISO se encuentran: 

  • ISO 14040:  marco general, principios y necesidades básicas para realizar un estudio de Análisis de ciclo de vida
  • ISO 14041: necesidades y procedimientos para elaborar la definición de los objetivos y alcance del estudio y para realizar el informe del análisis del inventario del ciclo de vida 
  • ISO 14042:  guía de la estructura general de la fase de análisis del impacto, AICV
  • ISO 14043: recomendaciones para realizar la fase de interpretación de un Análisis de ciclo de Vida o los estudios de un ICV.
  • ISO 14044: requisitos y directrices para la elaboración de un Análisis de Ciclo de Vida.

Fuente: Eurofins